10 de febrero, Día Mundial de las Legumbres

Hoy se celebra el Día Mundial de las Legumbres, declarado oficialmente por Naciones Unidas el pasado año y que éste año celebra su segunda edición. Las legumbres, son un grupo de alimentos, de alto valor nutricional, pero que se consumen en muy pocas cantidades alrededor del mundo.

Están presentes en las distintas gastronomías, desde el humus de garbanzos en el Mediterráneo, hasta un tradicional desayuno inglés con frijoles blancos, o el dal de la India compuesto por guisantes o lentejas. Pero sería buenísimo para las distintas sociedades y la nuestra, hacer de su consumo algo más habitual. La Organización Mundial de la Salud, recomienda el consume de legumbres de entre 3 a 4 raciones por semana.

En el Día Mundial de las legumbres, queremos imformar acerca del alto valor nutricional que poseen y de los grandes beneficios que pueden proveer a nuestra alimentación y la de nuestros hijos.

Hay muchísimas variedades de legumbres que podemos incorporar, desde porotos negros, rojos, blancos, garbanzos, lentejas, lentejones o arvejas que aportan beneficios nutricionales claves para conseguir una dieta equilibrada y cuidar nuestra salud.

Remojar o inclusive fermentar genera que las legumbres tengan menos antinutrientes. Los antinutrientes son sustancias que se encuentran en las mismas y hacen que aprovechemos menos sus propiedades, o que nos caigan un poquito más pesadas, pero consumirlas no causa ningún tipo de daño, sino todo lo contrario.
Si por alguna razón, no hubo tiempo de remojarlas previamente la noche anterior a la preparación, sigue siendo muy sano prepararlas y consumirlas.

Las legumbres pueden incorporarse en los niños desde el inicio de la alimentación complementaria, es decir a partir de que el niño cumple los 6 meses y cumple con los requisitos para ir descubriendo los nuevos alimentos sólidos. Las legumbres se pueden adaptar para el consumo de los pequeños en forma de puré o en distintas preparaciones para su consumo.

Las legumbres son un alimento rico en proteínas, calcio, zinc y hierro. Sería importantísimo incorporarlas a nuestra dieta en el día a día. Son económicas y tan sustentables que la Organización Mundial de la Salud, las posiciona dentro de los mejores alimentos para lograr Hambre Cero en el mundo.