Ejercicio para combatir la obesidad

Los especialistas coinciden que existen 2 factores claves en lo relativo a obesidad: la vegetación intestinal y el metabolismo. Mas hay un discute permanente sobre si el ejercicio o bien la dieta fomentan un cambio más efectivo en la vegetación intestinal, los microorganismos que procesan los comestibles y contribuyen a una minoración de la obesidad.

Ahora una investigación publicado en American College of Sports Medicine, por especialistas de la Universidad de Missouri, apunta al ejercicio como el factor con mayor peso en esta balanza. “Algunos aseveran que el ejercicio no es determinante – explica Vicki Vieira-Potter, directiva del estudio en un comunicado – en el perder peso puesto que acrecienta el hambre. La meta de este trabajo era observar el ejercicio con independencia de el perder peso para determinar otros beneficios metabólicos asociados a el ejercicio físico. Lo que pretendíamos era descubrir los efectos del ejercicio y de la dieta, separadamente, en el tejido adiposo”.

Teniendo esto en mente, el equipo dirigido por Vieira-Potter escogió 3 conjuntos de ratas con tendencia a la obesidad. A todas y cada una se las nutrió con una dieta alta en grasas. 2 de los conjuntos eran sedentarios y uno de ellos contaba con una rueda de ejercicios. De los 2 conjuntos sedentarios, uno podía comer todo cuanto quisiese y el otro fue sometido a una reducción de las porciones para simular las ventajas logrados por el conjunto que podía hacer ejercicio, el que podía comer todo cuanto quisiese.

Tras múltiples semanas de ensayo, las ratas sedentarias que podían comer la cantidad deseada eran las únicas obesas, algo que los especialistas aguardaban. Mas las ratas que hacían ejercicios eran metabólicamente más sanas que las que habían sido sometidas a una dieta y, pese a tener acceso ilimitado a el alimento, tenían una vegetación intestinal diferente a los otros conjuntos.

“Los roedores que habían ejercitado – concluye Vieira-Potter – tenían un metabolismo más alto, eran más activos, si bien no estuviesen ejercitando y su vegetación intestinal seguramente les resguardaría de futuros incrementos de peso. Nuestros resultados muestran la relevancia del ejercicio, sobre todo en la etapa juvenil”.