Terminó la carrera tan pronto que le confiscaron la bici para buscar un motor

El corredor Vasil Kiryienka, de treinta y cuatro años, se ha marcado un récord tan brutal que ha hecho sospechar de su limpia victoria a la Unión Corredor Internacional. Sus marcas son pasmantes. Ha recorrido cincuenta y tres con cinco km en solo 1:02:29,45, que, a fin de que os hagáis una idea, quiere decir que ha circulado a una velocidad media de cincuenta y uno y trescientos sesenta y ocho Km/h.

Tan desvariado dejó al mundo entero, que la UCI Road World Championships en Richmond (Estados Unidos) fue un paso más allí y creyó que la victoria del bielorruso se debía a las bondades del dopaje mecánico. Por este motivo, le ‘confiscaron’ su bici y la examinaron en pos de cualquier contenido ilegal en su interior, como por servirnos de un ejemplo un motor. Al no hallar nada en su interior, se la devolvieron a sus dueño pidiéndole excusas y le pusieron la medalla de oro en el cuello como merecía.

El término de dopaje mecánico se ha puesto en rema en el Tour de Francia del año en curso. Merced a los avances de las nuevas tecnologías, los organizadores sospechaban que podría haber oculto un pequeño motor que le asistiera en el pedaleo, como los que tienen las bicis eléctricas. Pese a que ningún corredor se le ha ocurrido poner un aparato tan deshonroso en su vehículo, la UCI ha incluido esta clase de controles en pruebas como la Vuelta a España, el Giro o bien el Tour de Francia.