UBER QUIERE CONSTRUIR TAXIS VOLADORES

No es ningún secreto que Uber pretende mudar las reglas del juego. Es, más bien un lamento que no a todos les suena agradable. Mas la compañía tiene la virtud de encandilar a cualquiera con sus proyectos más ambiciosos, basados en ideas que semejan encajar mejor en un cómic de ficción de los años treinta que en la realidad de dos mil diecisiete. Lo último es Uber Elevate, un proyecto para edificar taxis voladores que podrían atravesar el cielo sobre su flota de vehículos autónomos, aerotaxis que puedas llamar con un solo clic. ¿Mas de qué forma serían semejantes automóviles? La contestación puede estar en la cabeza del ingeniero Mark Moore.

O bien quizás esté escrita, negro sobre blanco, en un artículo que publicó en dos mil diez. Moore, quien entonces trabajaba en la NASA, reunió en él detalles que podrían ser relevantes en el momento de diseñar un vehículo de dimensiones reducidas, concebido para recorridos cortos y que despegue y aterrice verticalmente. A rasgos generales, es justo el género de vehículo que Uber precisa para cumplir su promesa de llenar un recorrido de 2 horas en una cuarta parte de hora.

Su avión despegaría merced a un conjunto de múltiples hélices, orientadas cara el cielo, tendría un motor eléctrico que no generaría ni polución ni niveles elevados de estruendos y unos costos de mantenimiento muy accesibles. Para confort del pasajero, su motor eléctrico reduciría las vibraciones propias de un helicóptero.

Mas la clave a fin de que Uber Elevate salga adelante no semeja estar en la tecnología. Conforme la propia compañía, el transporte a través de un helicóptero del tamaño de un turismo es unas veinte veces más costoso que el vehículo, y eso se debe a que la fabricación de estos automóviles es carísima. En el futuro que pinta la compañía, moverse en aerotaxi va a ser más asequible que en un vehículo. No explican por qué razón, mas se comprende que van a estar ahí para sacar provecho. Va a haber que verlo.